En los últimos días - probablemente
semanas- el proceso de actualización, refrendo y depuración del padrón de
militantes de Acción Nacional ha sido el tema recurrente de analistas y medios
de comunicación. Se ha sentenciado por no pocos el "desastre" del PAN
sin concederle ningún beneficio a este proceso, magnificando porcentajes y
olvidando exigirle a otras fuerzas políticas que cumplan lo que está en ley:
actualizar y registrar su padrón de militantes.
No ha sido una desbandada. El PAN no
es y no aspira ha ser una banda. Desbandadas en otros partidos. Menos aún una
huida, pues nadie presentó su renuncia. Fue una actualización. Actualización
como la que todos los mexicanos estamos obligados hacer ante el Instituto
Federal Electoral; casi cinco millones de mexicanos no actualizaron su
credencial de elector - cero tres- y ello no significa una
"desbandada" de ciudadanos o que quienes no actualizaron no crean en
la democracia. Simplemente es, que no actualizaron sus datos.
Se trató de un refrendo de la militancia.
Milita quien desea formar parte, adquirir derechos pero también obligaciones.
Diferente es simpatizar, es decir, sentirse parte. Acción Nacional no agota su
fuerza electoral en su padrón, hay millones de ciudadanos que simpatizan con el
PAN sin militar.
No temo en calificar a este proceso
como el primer gran paso de Acción Nacional para "seguir
continuando". El PAN se fortalece porque conoce la realidad; porque nos
mantenemos siendo el único partido político en México que publica su padrón, que
conoce a sus militantes, pero sobre todo, que respeta sus libertades. No solo
sabemos sus nombres y apellidos, en el PAN cada militante tiene voz y voto.
Dice la máxima, que la política es el
arte de lo posible a partir de lo real.
La realidad del PAN en nuestro Estado es que contamos con un padrón
puntual y que somos la primera fuerza en el Congreso Local y en el número de
Legisladores Federales por Querétaro. La realidad es que hoy contamos con un
padrón, con una militancia, con la cual vamos a recuperar la Gubernatura.
Habiendo puesto el ejemplo, Acción
Nacional lanza un reto de transparencia - de cara a los ciudadanos- al resto de
los partidos políticos: Publiquen y registren ante la autoridad su padrón de
miembros.
Lo apuntaba Luis Felipe Bravo Mena en
su artículo publicado por este diario: "El IFE está obligado a requerir a
los partidos a comprobar su militancia pero ni el PRI ni el PRD han podido
presentar sus padrones. Hace tiempo se les concedió una prórroga para que
cumplan con esta obligación y no lo han hecho. Los tiempos están vencidos por
lo que es hora que la autoridad los llame a cuentas."
Asimismo, el artículo 32 fracción
XIX de la Ley Electoral del Estado obliga a los partidos polí́ticos a
"Tener un padrón de miembros de acuerdo a sus estatutos, mantenerlo
actualizado y entregarlo certificado al Instituto Electoral de
Querétaro."
Es claro que el PAN ha actuado con
entereza, con responsabilidad y sin miedo a las críticas. Es preciso recordar a
Don Carlos Castillo Peraza: "Amigos: confianza. El PAN ha visto tantas
veces su esquela en los periódicos, que se empieza a sospechar que es
inmortal."
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