Después de haber superado un
largo proceso que inició a mediados de diciembre pasado, finalmente el Partido
Acción Nacional en Querétaro tiene un nuevo Consejo Estatal y definidos a sus
Consejeros Nacionales.
En su momento quienes
aspiraban a ser Consejeros Estatales y Nacionales, tuvieron que acreditar el tiempo
de su militancia, aprobar un examen de conocimientos y conseguir por la vía
democrática el apoyo de los militantes de un municipio para presentarse ante la
Asamblea Estatal realizada el sábado anterior.
Cerca de 650 militantes
gozaron de la representación legítima de más de 7,500 militantes de la entidad para
darle al partido un nuevo Consejo. Es decir, solo uno de cada diez militantes
del partido definió con su voto a los nuevos consejeros. Quienes votaron, asumieron
el derecho y el deber moral del 90% de los militantes; de ese tamaño fue su
compromiso y responsabilidad en ese día.
Si bien, la reforma
estatutaria le quitó al Consejo la facultad de elegir a los dirigentes del
partido - trasladando esta responsabilidad a todos los militantes- los Consejos
siguen siendo los órganos orientadores de la acción política y le permanecen
atribuciones extraordinarias como la aprobación de la plataforma electoral y la
autorización para la suscripción de convenios de asociación electoral con otros
partidos para las próximas elecciones, pero sobre todo, le subsiste ser ese órgano
consejero que proponga al Presidente las medidas y programas que considere
convenientes, es decir, fungir como la conciencia de Acción Nacional.
Acción Nacional
fue concebido, desde el primer momento, como una obra permanente, fincada sobre
el doble cimiento esencial de una doctrina inamovible de la naturaleza de la
persona y del alma fundacional de la Nación.
Los resultados
de esta elección han confirmado que en Acción Nacional hay liderazgos con el
aprecio y respeto ganado y que asumen la alta encomienda de guiar al partido a
través de las mejores decisiones.
En el Consejo
reside el celoso guardián, que ha de observar primero y en congruencia vigilar
después, que nuestro partido transite por el propósito de su origen y la
identidad de su fundación.
Existe confianza, el partido
va por buen camino, se encuentra bien, preparado y posicionado para enfrentar los
retos que habrán de llegar. La tarea no ha sido fácil ni breve, pero en mucho a
dependido de la participación constante, de la actitud con la que nos
conducimos y de la responsabilidad al compromiso libremente aceptado.
La elección de los nuevos
consejeros de Acción Nacional nos recuerda a todos, sin excepción, que con disciplina,
compromiso, diálogo y tolerancia podremos asegurarle el mejor futuro al Partido
Acción Nacional.
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